20131206

la escalera de los diose8

en la fiesta, como la otra casa era un hostel y venía gente todo el tiempo, había de todo y por todos lados. yo di al fin con mis amigos, los encontré y sentí un refrescante alivio, porque como les dije antes mis hermanos yo transpiraba transpiraba transpiraba como un marrano, y alguien me acercó una fría cerveza y la bebí con orgullo felicidad & tiempo, despreocupado y por primera vez en lo que ya eran semanas, no pensaba en ella.
de repente detrás mío se escuchó un corcho abandonando la botella de champagne como es debido, y me di vuelta y julieta estaba sentada en una hamaca de color blanco, se balanceaba con un solo pié casi por obediencia lentamente, sostenía una copa de vino blanco y escuchaba a la persona que estaba a su lado, la cual no recuerdo en absoluto, sabrán disculparme mis hermanos..
las rodillas desaparecieron
la garganta se cerró en seco
el estómago me dio un vuelco, pero de 5g de fuerza más o menos..
los labios comenzaron una rutina que incluía cerrarse, estirarse, secarse, aplanarse, buscar los dientes.. en fin, sí, julieta estaba en la fiesta y alguien sabía de esto y yo creía que sabía quien podía saber de algo, ok, bien..


un boludo fue y la saludó agachado y todo y le dijo oh sí qué linda salís en tal cosa y qué simpatía y qué estás haciendo [yquétecalientaimbécil] y que bla blu ble blii.. yo la miré casi como escondido, la espiaba como en un infantil dejavú, podía olerla hermanos míos..



luego la razón tomó el control de nuevo y me escabullí entre varios para ir con mis amigos. pero ya sabía donde iba a estar mi cabeza y uno de sus ojos toda la noche. no sentí el menor remordimiento ni advertencia para no hacerlo. pero, bueno, quería otro trago y algo que me indicara: veníipapáa.. cóomoandáas.. querés qu..? eso. quería el jugar al metegol con los vagos y cagarme de risa un rato y beber y [matrimonio boda compromisos te gustaría] y pasar el rato y luego, mucho más luego.. ahí sí, ahí la buscaría..



y porqué no ahora?



llevaba un vestido blanco de esos ligeros y casi rurales. las uñas de un extraño brillo al mover su mano en algún gesto. yo sólo la observaba hermanos míos.. nuestra historia, los últimos eventos, la agria [pero desinteresada y liberadora] separación, el dolor, el horror..

ahora viene toda la historia de nuestro primer reencuentro. 


pero no será narrada y saltamos al año siguiente cuando me casé con graciela, la mudanza a canadá, la vuelta, las enfermedades, los planes, las riñas, las apuestas, en fin.. elegí contar sobre mis días con la mujer que me dio ánimo a perseguir otra vida.



sin julieta

otra vida


[no es recomendable leer filosofía si uno está casado sabés que el banquete es un contrato]



para cerrar aquella noche, sí, fui, estuve con ella y nos visitamos y nos hicimos bien..



pero no

tengo que contar de mi vida ahora de casado con grace -así le digo yo queridos hermanos y ella me mira como si yo fuera un calambre haciéndose pasar por adormecimiento- con quien comparto.. tanto y.. vivimos en un departamento en plena ciudad.. la escalera de los dioses sigue siendo útil, amigos míos.